INMA SHARA, EJEMPLO DE DON Y ESFUERZO

Su nombre artístico es Inma Shara, aunque en su documento nacional de identidad figura Inmaculada Concepción Lucía Saratxaga . Nació en Amurrio (Álava) en 1972 y, desde que descubrió su pasión por la música con cuatro años, nunca se ha separado de ella, primero como entretenimiento y luego como profesión. Dicen que subida en el escenario y con la batuta en la mano es capaz de convertirla en una varita con la que transformar las notas de música en hermosas melodías. Inma Shara es una de las seis mujeres directoras de orquestas de música clásica en el mundo y la primera que ha dirigido en el Vaticano, donde dice que le temblaron las piernas pero no las manos. Ha recibido el premio a la Excelencia Europea y asegura que para ella es más importante la música, la valía del espíritu artístico. Cfr. Musicoterapia -la armonía como terapia

1. “Entiendo que la música es un modo de transmitir la belleza. Quizá sea esa la mejor definición de la música: es la belleza que nace del interior, una expresión de la alegría de vivir”. La música ayuda a afrontar de forma positiva las situaciones dramáticas(entrevista de la revista Nuestro Tiempo).

2. ¿Es verdad que la música amansa a las fieras? Espera, ahora mi clásica pregunta, ¿cuál es tu receta para combatir la crisis? ¿Comprar las batutas en los chinos?

Realmente la música, siempre lo he dicho, dota al ser humano de una gran paz interior indescriptible -y esto no me cansaré de decirlo-, de serenidad. La música clásica tiene la capacidad de despojar al ser humano del aspecto racional, porque la razón es la que guía, pero los sentimientos son los que movilizan. Combates la crisis valorando muchísimo más lo que uno tiene, y hoy por hoy no tengo la necesidad de comprar batutas, porque tengo muchas. Además, casi siempre uso la misma porque mis experiencias con ella, hasta el día de hoy, han sido muy satisfactorias musicalmente hablando.

3. ¿Que te ha inspirado o te ha dado fuerzas para estar donde estas sin cansarte o tirando la toalla?

La humildad, las ganas de superación, la autocrítica y siendo realmente consciente de que en la vida no hay felicidad completa, y que cada uno tenemos que escribir los pentagramas de nuestra propia sinfonía desde el amor, el compromiso y la responsabilidad.

4. ¿Qué tipo de música escuchas para desconectar, que no te haga pensar en tu trabajo como directora?

La gran voz, Frank Sinatra. Y todas estas voces, de alguna manera, que evoquen poesía, poética y que supongan una interpretación musical, de verdad, donde no hay límites. Escucho también la música de la naturaleza y el sonido que evoca el silencio de la misma. (Algunas preguntas de Encuentro digital con Inma Shara).